HABLEMOS DE SALUD MENTAL
Hoy en día, la salud mental se ve cada vez más afectada por el estrés cotidiano. Este puede ser, para muchos jóvenes, un factor detonante de trastornos como depresión y ansiedad. En el marco de la campaña “Queremos escucharte”, el Centro de Orientación Psicológica (COP) de la Universidad Católica invita a los estudiantes que están pasando por un momento difícil a acercarse libremente porque el COP está dispuesto a escucharlos.
Salud mental es estar bien con uno mismo
La salud mental es un estado de bienestar en el cual el individuo es consciente de sus propias capacidades, puede afrontar las tensiones normales de la vida, puede trabajar de forma productiva y fructífera y es capaz de hacer una contribución a su comunidad. La dimensión positiva de la salud mental se destaca en la definición de salud que figura en la Constitución de la OMS: «La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades».
La salud mental es un estar bien con uno mismo, con la sociedad y con el entorno.
Algunas cifras
La depresión y la ansiedad son enfermedades que vienen aumentando significativamente en estos últimos años y que amenazan a la salud mental. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), para el año 2020 la depresión será considerada una pandemia.
Paraguay es el cuarto país de América Latina con mayor porcentaje de población con depresión; el 5,2%, que equivale a alrededor de 332.000 personas; y el segundo con algún trastorno de ansiedad, 7,6%, unas 483.000 personas, de acuerdo a la OMS. Según datos del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social (MSPyBS), 120.000 consultas se han recibido en las 90 unidades de salud mental pertenecientes al Ministerio y ubicadas en hospitales públicos, la mayoría en Gran Asunción y cabeceras departamentales.
¿Cómo afecta la depresión o la ansiedad a la persona?
La depresión y la ansiedad afectan todas las dimensiones del ser humano. En primer lugar, la dimensión física se ve afectada con un desgaste de energía, fatiga, problemas de sueño, escaso apetito, estado de agitación, entre otras. Por el lado emocional, el ánimo está abatido, nada causa placer, existe irritabilidad e hipersensibilidad. Existe un verdadero sufrimiento, disconfort y “dolor del alma”. Con respecto a lo cognitivo, pensar, concentrarse, recordar cosas y realizar decisiones simples se vuelven difíciles. Por último, el aspecto conductual también se ve afectado con aislamiento social, desinterés en la comida, hábitos, en las relaciones. Además, genera irritabilidad y reacciones volátiles e impredecibles. También existe una dificultad de adaptarse a todo cambio dentro de las exigencias del entorno, lo cual genera un estado de frustración.
Cuidar de la salud mental es importante para ayudar a hacer frente a los problemas de la vida, estar físicamente saludable y limpio, mantener relaciones sanas. Uno puede desarrollar buenos hábitos para mejorar su salud mental como tener una actitud positiva, mantenerse en buena forma física, conectarse con los demás, desarrollar un sentido de significado y propósito en la vida, dormir lo suficiente, desarrollar habilidades para enfrentar problemas, meditar; pero lo más importante, es acudir a la ayuda de un profesional, para poder obtener un tratamiento y seguimiento apropiado.
Si deseas contactarte con el Centro de Orientación Psicológica y agendar una cita con un profesional, puedes llamar a los siguientes números: 440-174, 491-314 y 0981 884-450. El servicio tiene un costo de 10.000 Gs por consulta. El horario de atención es lunes, miércoles y viernes de 13:00 a 17:15 hs; y martes y jueves de 7:30 a 17:15 hs.