Pelusa Rubín es una mujer de gran carisma y considerada por todos y todas un ícono de la televisión paraguaya. Presentamos a continuación una entrevista realizada a la conocida conductora donde nos cuenta sobre su infancia, su carrera y sus sueños.
Texto: Lía Milillo Marinoni
Foto: Gentileza
-¿Cómo fue la infancia de Pelusa? ¿Qué le gustaba hacer?
Viví parte en Paraguay y otra parte en la Argentina, hasta que lo conocí a Emilio, a los 16 años, y volví para quedarme definitivamente aquí en Paraguay. No jugaba mucho. Cuando era chica estaba muy pendiente de mamá y muy cerca de ella, tenía pocas y buenas amigas, son las que mantengo hasta ahora. Jugaba a ser artista, y mis hermanos me tenían que aplaudir y mirar cuando yo actuaba (entre risas).
-¿Cómo inicia Pelusa Rubín en los medios de comunicación?
Por supuesto que me inicié en los medios de la mano de mi padre, tío Arturo, tío Armando, todos trabajaban en los medios. Y así arrancamos, haciendo telenovelas y luego radio, en mi adolescencia.
-Según tu punto de vista, ¿crees qué existe la libertad de expresión en los medios de comunicación?
Hoy, sí hay libertad de expresión. No tiene nada que ver con lo que yo viví en la adolescencia en la época de Stroessner. Ahora, la pregunta es, “¿qué haces con esa libertad de expresión, y con toda la información que le damos a la gente a través de los medios?, ¿cómo manejas? Y es ahí donde la Justicia debe actuar.
-Hoy en día, ¿crees que la sociedad «machista» condiciona a las mujeres para estar en los medios de comunicación?
No creo que condicione nada el tema machismo. Aquí, en los medios creo que hay muchas mujeres, y con mucho talento. Para mí hay más que varones, incluso. No creo en eso.
La sociedad machista, como vos decís, y muchas mujeres con esa mentalidad critican muchos más a las mujeres, y estamos más en la mira. Creo que nosotras las mujeres nos criticamos más entre nosotras que los propios varones. Eso es aquí y en todo el mundo.
-Por último, ¿cuál es tu mayor sueño?
Mi sueño es ver a Paraguay con la educación que cada uno de los niños de nuestro país se merece, educación integral. Que la gente tenga trabajo, que sepa cómo llevar el pan a su casa, y eso depende todo de la educación. Una mujer educada no se va embarazar, como se embarazan aquí en nuestro país y en gran parte de la región. Una mujer con educación tiene la base sólida para poder manejarse en esta vida, manejar una familia, manejarse laboralmente. Así que la educación es la base de todo, para hombres, mujeres y eso lo que sueño para nuestro país.
Que los niños tengan escuelas con una docencia impecable, y estén orgullos de ser docentes, como en otros países que son tan respetados los docentes y tienen el mismo rango de un presidente, porque en manos de ellos está la educación de nuestros niños y niñas.
Espero y sueño con un país educado, con escuelas que sean dignas para nuestra niñez.