El pasado domingo 14, en un café céntrico, la actriz Verónica Cabañas (27) se reunió con nosotros a charlar y contarnos su experiencia. La pasión de las tablas, las cámaras, las luces y la acción en Paraguay aún están creciendo; tanto el mundo del audiovisual como el teatro van siendo más inclusivos, nos comenta Verónica Cabañas, una mujer que empezó en el auge teatral siendo la chica tímida del grupo.
Texto: Camila Rodríguez
Foto: Gentileza
¿Cómo te involucraste en el mundo del teatro?
– Desde los 15 años, me gustaban demasiado las comedias románticas y musicales. Siempre creaba personajes para salvar a todos y ser la heroína de las películas. Pocos meses de cumplir 17, descubrí un taller dado por Tana Schémbori y Juan Carlos Magnelia y ese fue mi primer salto a la actuación.
¿Cuándo iniciaste tu carrera?
– Al terminar el colegio, arranque en TIA aspirando al mundo audiovisual, persistía todavía mi amor por las películas, pero luego, a los tres años de carrera, recién concreté mi primer trabajo cinematográfico con Mara Portillo, quien es una audiovisualista y diseñadora.
Entre sonrisas y un poco de picardía, Verónica dice que “un cineasta siempre tiene que ser multifacético para sobrevivir y ella (Mara Portillo) es una capa en lo que hace, gracias a ella conocí a Luis Gutiérrez y fuimos protagonistas del cortometraje El Margen, en el 2013. Fue la primera vez que me introducía al mundo de los cortometrajes».
¿Cuándo debutaste en el teatro?
– En 2014, fue mi primera vez sobre las tablas del teatro como la novia en la obra popular El Luisón de pago largo del director Arcena. Ahí fue que descubrí una nueva pasión. Mi cara tiene expresiones cinematográficas muy fáciles de tratar para la cámara, pero en el teatro tenés que ser mucho más expresivo y ese era el reto que más me emocionaba, expresar hasta la última mueca y todo un entrenamiento integral.
¿Qué significa el teatro en Paraguay?
– El teatro es muchísima pasión, la gente que trabaja en teatro en Paraguay es porque está profundamente enamorada del teatro, profundamente enamorada de lo que implica su oficio. Te tiene que apasionar para hacer producir e invertir a costa de poder perder todo lo que invertiste con brillo en los ojos.
Verónica Cabañas, con 27 años ha recorrido escenarios, filmado cortometrajes y hecho producciones. Es sin dudas, una artista con todas las letras que se atreve a renovar y destacarse siendo ella misma en todo trabajo que realice. En medio de desafíos y satisfacciones, actualmente, se inclina más por el lado de la producción, si bien su pasión por actuar siempre está presente como artista, sabe que debe explorar más allá de sus límites y buscar equilibrar su vocación y profesión.