Transporte público, pensamiento crítico y cerco mediático

Nota: Celso Velázquez Oddone

La gestión del transporte de pasajeros en Venezuela y Paraguay sirve de ejemplo para comprobar que existe un cerco mediático, donde las empresas privadas de noticias direccionan el contenido siempre “hacia un mismo molino”.
En Paraguay, Horacio Cartes optó por el siguiente sistema con el objetivo de renovar la flota de unidades del Transporte de pasajeros en el área metropolitana del departamento Central: beneficiar a los empresarios del ramo subsidiando el 30 % de cada bus nuevo y privilegiarlos aún más elevando el precio del boleto. Ambas medidas van en contra de los intereses de los usuarios, en su mayoría pertenecientes a la clase trabajadora.
En Venezuela, con una visión más estratégica, de mediano y largo plazo, recientemente fue inaugurada una planta de fabricación de autobuses de la empresa china Yutong, mediante una alianza entre esa compañía y el Gobierno de ese país, como parte de un convenio aún más amplio en el marco de las relaciones bilaterales entre Venezuela y la República Popular China.
En nuestro país hemos llegado a renovar apenas 350 buses de una flota de 2.500 correspondientes solamente al departamento Central, dejando intactas las condiciones deplorables del transporte en el resto del país.
Sin embargo, la planta de fabricación habilitada en la región venezolana de Yaracuy, tiene la capacidad de producir 96 buses al mes, es decir, unos 3900 por año, con posibilidad de abastecer no sólo a áreas metropolitanas, sino a todo el territorio, como apuesta del Plan de modernización del transporte que se apresta en ese país. Se debe recalcar además que, en el marco del mismo convenio, los chinos proveyeron previamente unos 700 buses.
Podrá resultar extraño tal vez el planteamiento del título de éste artículo con los primeros párrafos. Sin embargo iremos trazando una relación entre el tema del transporte y la existencia de una cerco mediático de parte de las principales empresas de comunicación del país y el mundo hacia Venezuela y la necesidad de fomentar el pensamiento crítico para poder debatir los sucesos con propiedad.

Mediante una rápida investigación, introduje las palabras claves: “venezuela yutong” en los buscadores de los tres principales portales digitales de noticias del Paraguay y otros tres de los más importantes a nivel internacional. Tanto en Abc Digital, como en Última Hora Digital y el portal Hoy, no se ha publicado nunca el avance en términos de transporte ocurrido recientemente en Venezuela.
0 resultados produjo la misma búsqueda en la página de CNN en Español, ABC News y Fox News, de los Estados Unidos.
Un ejercicio tan simple basta para confirmar que existe un cerco mediático por parte de las empresas de comunicación, que omiten todos los avances logrados por la denominada “revolución bolivariana” en Venezuela. Avances reconocidos por importantes organismos, como la Organización de las Naciones Unidas para la Cultura y la Alimentación (FAO), consultar link al final del artículo.
Llegando a este punto, el autor desea dejar en claro que su intención no es defender al Gobierno de Venezuela ni a la figura de Nicolás Maduro, una figura desgastada que sin duda no ha podido gobernar ese país con el mismo suceso que su antecesor.
Es un llamado a que no nos quedemos sólo con lo que nos dicen empresas como Abc Color (Zuccolillo), Última Hora (Vierci) u HOY (Cartes). Empresas al fin, cuyos intereses son partiuclares y no coinciden con los intereses de la sociedad en su conjunto.
Recientemente, en más de una ocasión, me ha tocado participar en conversaciones donde compatriotas han defendido con vehemencia, a viva voz, la postura antichavista.
Sin embargo, al consultarle a estas personas si han recurrido a otras fuentes de información más allá de medios como los que citamos más arriba, la respuesta frecuente es que no.
Como universitarios, sí, pero también como personas que deseen ir por la vida con dos dedos de frente y sin que se nos embrome, es fundamental consultar todas las fuentes de información posibles para llegar a un razonamiento crítico y lo más propio posible acerca de las cosas que ocurren.
Visto lo visto más arriba, debemos plantearnos las siguientes preguntas:
¿Puede negarse que existe un cerco mediático en torno a Venezuela, por parte de empresas privadas cuyo negocio es lucrar formando opinión a través de noticias direccionadas de acuerdo a sus intereses particulares?
Dejando de lado las pasiones, sinceramente ¿Es mejor la alternativa planteada por Venezuela o la planteada por el Paraguay?
¿Puede denominarse “dictadura” a un Gobierno que se ocupa efectivamente, y con propuestas estratégicas, de garantizar los derechos básicos de la población, como es el derecho al transporte?
¿Por qué a diario periodistas y medios colocan sólo una de las visiones sobre Venezuela, no consultando ni exhibiendo otras fuentes, traicionando de esa manera una de las premisas éticas más básicas de la profesión, como es consultar y dar espacio a “todas las campanas”?
¿Es verdaderamente posible desempeñar la labor periodística bajo los principios éticos ante tan claros ejemplos de mandar por el basurero premisas elementales, sustanciales a un trabajo tan importante como es transmitir información?